Industria

Sistemas de alimentación: Una vibración diferente

Sistemas de alimentación - Línea de transporte

Los tazones de alimentación vibratoria siguen siendo la tecnología de punta en sistemas de alimentación para suministrar un flujo constante de piezas en los sistemas de ensamblaje automatizados. Pero, la alimentación flexible está lentamente forjando su propio nicho en el mercado. Esto se debe a que la tecnología ofrece varios beneficios a los fabricantes.

“Lo que hace atractivo a un alimentador flexible es que puede manejar una amplia gama de piezas sin que el operador tenga que cambiar nada en la máquina”, dice Eric Lewis, fundador, CEO y presidente de Flexomation LLC. 

“El detalle es que no se necesita algún tipo de herramienta especial debido a que la máquinaria no se ve afectada por pequeñas variaciones en las piezas. Esta es una ventaja significativa en comparación con otros tipos de alimentadores como los tazones vibratorios”.

Lewis señala muchos otros beneficios de los alimentadores flexibles, incluyendo que no se atascan las piezas, una operación bastante silenciosa y eficiencia en el espacio. 

Los alimentadores flexibles también pueden manejar simultáneamente múltiples tipos de piezas, como una arandela y una tuerca, siempre y cuando la tasa de alimentación no sea demasiado alta y el operador realice un cuidadoso desarrollo de la aplicación en el alimentador.

“Con recurrencia, una tasa o medida de por lo menos unas 45 partes aproximadamente por minuto es bastante común con los alimentadores flexibles”, añade Lewis. “No obstante, los sistemas que son del tipo recirculante tienen la capacidad de alimentar piezas a unas velocidades aproximadamente superiores a 120 ppm”.

Lewis recuerda una aplicación en la que un fabricante de herramientas médicas alimentaba simultáneamente cuatro piezas en el alimentador Flexomation FXM-100 para acelerar el montaje de una pequeña pinza médica. Las cuatro partes eran un resorte, una pinza y dos pequeñas mordazas moldeadas por inyección.

La serie FXM de Flexomation incluye los modelos 100, 180, 240 y 300, con el número que indica el ancho milimétrico de la superficie de los sistemas de alimentación de las piezas. Los cuatro modelos permiten la retroiluminación para mejorar la visión de la cámara, y están disponibles con un Prealimentador de cinta transportadora (CPF). 

Otras piezas alimentadas con estas unidades son los soportes metálicos, y las piezas cilíndricas, planas y delgadas, y pequeñas, de formas extrañas, como las agujas de sutura, para las empresas de dispositivos médicos.

“A veces, los fabricantes utilizan alimentadores flexibles porque ningún otro tipo de alimentador puede manejar efectiva o eficientemente las piezas que la compañía necesita alimentar”, señala Chris Schombert, vicepresidente ejecutivo de Hoosier Feeder Co. 

“Pero, en su mayoría, estos alimentadores se eligen por su capacidad para manejar cualquier pieza que no sea de calidad de automatización”. Por ‘calidad de automatización’, me refiero a las piezas que son consistentes en forma y no tienen defectos”.

Según Brookshire, la variedad de piezas que los alimentadores flexibles pueden manejar es bastante extensa. Observa que algunos usuarios del alimentador flexible de su compañía pueden alimentar más de 50 tipos diferentes de piezas en el transcurso de varios meses. 

Esta flexibilidad resulta en grandes ahorros de costos al eliminar la necesidad de comprar múltiples sistemas de alimentación para distintas funciones en el proceso de fabricación.